La Unión de Usuarios y Consumidores manifiesta su profunda preocupación por los hechos ocurridos recientemente en la provincia de Neuquén, donde integrantes de comunidades mapuches, acompañados por organizaciones sociales y de derechos humanos, fueron desalojados con violencia durante una protesta pacífica frente a la Casa de Gobierno provincial.
La decisión de llevar adelante esta medida de protesta fue tomada luego de un extenso período de reclamos sin respuestas concretas por parte del Estado, lo que generó un profundo malestar en las comunidades afectadas.


Según lo relatado por Pablo Meuli ,miembro del Comité Provincial Contra la Tortura y uno de los detenidos durante el operativo en el programa Derechos a la Carta, producción radial de la Unión de Usuarios y Consumidores que se emite por Radio Zónica, la manifestación consistía en un encadenamiento simbólico en reclamo por el reconocimiento de la personería jurídica, el respeto a los derechos territoriales y el cumplimiento de compromisos asumidos previamente por las autoridades. Sin embargo, el operativo policial avanzó con una orden de desalojo que derivó en una intervención violenta. Entre las personas heridas se encuentran mujeres, jóvenes y niños, uno de ellos con una posible fractura de costillas.
“No había palos ni piedras. Era una resistencia con el cuerpo, con dignidad y con frío”, señaló Meuli.
Estos hechos generan una preocupación, no solo por el uso desmedido de la fuerza, sino también por el contexto en el que ocurren: un escenario donde las demandas históricas de los pueblos originarios se ven desoídas, y en el que el diálogo entre las autoridades y las comunidades parece estar debilitado.

Desde la Unión de Usuarios y Consumidores entendemos que la justicia social incluye el derecho a la identidad, al territorio, al reconocimiento legal y a la participación plena de las comunidades en las decisiones que las afectan. Consideramos esencial que se abran canales de diálogo respetuosos y efectivos que eviten la escalada de conflictos y permitan avanzar hacia soluciones duraderas.
Acompañamos los esfuerzos de visibilización que llevan adelante las comunidades y sus organizaciones aliadas, y convocamos a la ciudadanía a mantenerse informada y comprometida con la defensa de los derechos humanos fundamentales.