Día Internacional del Cooperativismo

Una economía centrada en las personas también defiende derechos

Cada 5 de julio se conmemora el Día Internacional del Cooperativismo, una fecha que invita a reflexionar sobre la importancia de las cooperativas como formas organizativas democráticas, solidarias y con fuerte anclaje territorial.

En un contexto marcado por la concentración económica, la exclusión y la pérdida de derechos básicos, el cooperativismo representa una alternativa real, eficiente y justa. Su lógica de funcionamiento basada en la participación de sus miembros, el acceso equitativo a servicios y el reparto de excedentes con fines comunitarios pone en primer plano a las personas por sobre el lucro.

Las cooperativas y el acceso a servicios esenciales

Desde la Unión de Usuarios y Consumidores, reconocemos el valor que tienen muchas cooperativas en garantizar el acceso a servicios públicos, conectividad, crédito, vivienda, salud y alimentos, especialmente en zonas donde el mercado no llega o llega con desigualdad.

Cooperativas eléctricas, de agua, de telecomunicaciones y de consumo han sido históricamente pilares del desarrollo local y del ejercicio de derechos en condiciones de cercanía, calidad y transparencia. Además, su organización horizontal y su sentido de pertenencia fortalecen el control social y la participación comunitaria.

Cooperar es cuidar

Celebrar esta fecha es también reconocer una forma distinta de construir economía: una que prioriza a las personas, al entorno y al trabajo digno. En tiempos donde se pone en discusión el rol de lo público, el cooperativismo demuestra que la gestión colectiva y solidaria de los bienes comunes es posible y necesaria.

Desde nuestra organización, reafirmamos el compromiso con la economía social y solidaria, convencidos de que los principios cooperativos están profundamente ligados a la defensa de los derechos de usuarios y consumidores.

Porque cooperar no es competir,
es construir comunidad con equidad y justicia social